Tipos de parásitos
Un parásito es aquel que vive a expensas de otro organismo mayor, este último le proporciona la protección física y las diversas sustancias que necesita para su nutrición.
Resulta oportuno mencionar que la mayoría de los parásitos pueden reproducirse varias veces dentro de un solo ser vivo, siendo los animales, así como nosotros los seres humanos sus principales huéspedes. Existen muchísimos tipos de parásitos distribuidos a lo largo y ancho del planeta, tantos que tendríamos que redactar un gran libro para poder describirlos a todos. Sin embargo, en este artículo te mostraremos de forma resumida, los grupos de animales parásitos que comúnmente tienen relación con las enfermedades en el hombre.
En primer lugar, hay que aludir que la fisonomía de los distintos tipos de parásitos y su relación con el huésped son estudiadas por la parasitología.
Y…
¿QUÉ ES LA PARASITOLOGÍA?
Titulares del artículo
Es la parte de la biología encargada de cubrir o tratar aquellos fenómenos relacionados con la dependencia de un organismo vivo respecto a otro.
El parasitismo por su parte, es una asociación que implica una estrecha relación en la cual el parásito depende fisiológicamente de otro ser. Aunque el parasitismo no tiene por objeto causar efectos dañinos o patógenos, el parásito puede llegar a producir un daño variable a su huésped dando lugar a una serie de enfermedades.
En este mismo orden y dirección, la parasitología estudia las diferentes formas del parasitismo tales como: el comensalismo (donde el parásito vive a expensas de su huésped sin provocarle daño), el mutualismo (donde la relación entre parásito y huésped beneficia a ambos) y simbiosis (donde tanto el huésped como el parásito dependen de su mutua relación).
CLASIFICACIÓN DE ANIMALES PARÁSITOS
Generalmente se pueden diferenciar cuatro grandes clases, estas son:
CLASE PROTOZOA
Comprende a los animales unicelulares que tienen uno o varios núcleos, y citoplasma. El diámetro de este grupo de parásitos varía desde las 5 micras hasta los 150μ. Los protozoarios pueden moverse por medio de flagelos o membranas ondulantes que, en consecuencia, les permite cierta movilidad rotatoria.
Por su parte, estos parásitos pueden ingerir su alimento por fagocitosis o por medio de un citostoma, que es una estructura que se asemeja a una boca. Y la excreción se lleva a cabo por un ano primitivo llamado citopigio.
Casi todos los protozoarios son capaces de convertirse en quistes partiendo de trofozoítos. Este proceso de formación del quiste, se llama enquistamiento. Por último, se caracterizan por ingerir bacterias, glóbulos rojos de la sangre y algunas otras sustancias semejantes.
Dentro de los parásitos protozoarios más comunes podemos encontrar:
- Entamoeba histolytica (productor de la enfermedad: amebiasis)
- Endolimax nana
- Iodamoeba bütschlii
- Entamoeba coli
- Dientamoeba fragilis
2) CLASE CESTODA
A los parásitos pertenecientes a este grupo también se les denomina como Tenias o solitarias; se componen de una cabeza bien definida, el escólex, y de un cuerpo, los estróbilos. A su vez, su cuerpo se divide en varios segmentos llamados proglótides y cuentan con un sistema muscular que les permite moverse en forma semejante a un arco para flechas.
La principal actividad de las Tenias consiste en la producción de un gran número de huevecillos. Sin embargo, después de la fecundación, todos sus órganos reproductores se degeneran, a excepción de su útero. Por lo general, se adquieren al ingerir alimentos mal conocidos.
Dentro de las más comunes destacan:
- T solium (Tenia del cerdo)
- T. saginata (Tenia de la carne de res)
- T. latum (Tenia de los peces)
- H. nana (Tenia enana)
- E. granulosus (Tenia de los perros)
3) CLASE NEMATODA
Son gusanos redondos, filiformes y cilíndricos. Poseen un conducto digestivo completo con boca y ano. Cuando están en reposo algunos son rectos, mientras que otros tienen una curvatura natural en forma de espiral. Por otro lado, su cuerpo está recubierto por una cutícula fuerte y flexible.
Algunas de estas lombrices se adhieren a la pared intestinal y se alimentan por ingestión de la sangre. La infección de estas lombrices se realiza más que todo por la ingestión de huevecillos infectados. Y por lo general, estos organismos depositan sus huevos en la región perianal del huésped produciendo comezón.
Sus ejemplares más sobresalientes son:
- Necator americanus
- Ascaris lumbricoides
- Enterobius vermicularis
- Trichuris trichiura
- Ancylostoma duodenale
- Trichinella spiralis
- Strongyloides stercoralis
4) CLASE TREMATODA
Son conocidos comúnmente como Duelas. Tienen un cuerpo en forma de hoja, no segmentado, así como un ciclo vital bastante complejo. Generalmente, llegan a medir entre 2 y 3 centímetros con ausencia de un aparato respiratorio y circulatorio.
Los huevos de estos parásitos se pueden encontrar en los excrementos.
Existen tres especies:
- Shistosoma: se conocen como Duelas de sangre. Están dan lugar a la infección conocida como equistosomiasis, una de las enfermedades más infecciosas que hasta el día de hoy afectan a millones de personas en todo el planeta.
- Paragonimus: corresponde a la Duela del pulmón. Es la causante de la paragonimosis, enfermedad que compromete a los pulmones y demás órganos.
- Clonorchis y Fasciola: son las Duelas del hígado chinas y japonesas.
SABÍAS QUE…
Muchos parásitos saben vivir discretamente en nuestro cuerpo y multiplicarse en cantidades exorbitantes (hasta 200.000 huevos por día aproximadamente); todo ello sin que nos demos cuenta.
PRINCIPALES FUENTES DE INFESTACIONES DE PARÁSITOS
- La tierra o el agua; ya que pueden estar contaminados con excrementos que contienen en su interior las larvas, gusanos viables, huevos o quistes.
- El alimento; pues por lo general contienen parásitos en etapas inmaduras (huevos, quistes y larvas) o gusanos ya adultos como lo son las Tenias (de carne, de res, de cerdo, de pescado y de perro), triquinas, entre otros.
- Los insectos que pican; que generalmente chupan la sangre pudiendo transferir virus, paludismo y tripanosomas.
- Otros individuos infectados; ya sea directa o indirectamente.
- Uno mismo; puesto que algunos parásitos colocan sus huevos en la región perianal de la persona provocando una fuerte picazón que puede dar lugar a que la misma se rasque inconscientemente llevando luego las manos infectadas con los huevecillos a la boca (sobre todo en la noche), facilitando las autoinfecciones.